Se decidió estructurar el proyecto a partir la reformulación del canal y sus bordes.
El Canal se considera como el eje fundamental que organiza los diferentes espacios urbanos.
El proyecto se sintetiza en la interacción de elementos intercambiables, flotantes y móviles, ubicados en las diferentes áreas del canal. El resultado es un parque único de fuerte carácter y versatilidad.
Su estructura se basa en pequeños elementos, algunos fijos y otros móviles, que se disponen a lo largo de las márgenes del canal a la manera de vagones de tren.
Es pues una reinterpretación de la cadena de ADN, una forma de darle un carácter colectivo al objeto parque.
La multiplicidad de opciones y combinaciones que de aquí surgen, permiten variaciones en su configuración que se adaptaran a la evolución propia de la ciudad en el tiempo.